Críticas
Estreno en cines
Crítica de “Exorcismo: El ritual” (“The Ritual”), película de David Midell con Al Pacino
Ni la presencia de un actor legendario como Pacino evitará que este film caiga en el más rápido y absoluto de los olvidos.
Exorcismo: El ritual (The Ritual, Estados Unidos/2025). Guion y dirección: David Midell. Elenco: Al Pacino, Dan Stevens, Ashley Greene, Abigail Cowen, Maria Camila Giraldo, Meadow Williams, Patrick Fabian, Patricia Heaton. Fotografía: Adam Biddle. Edición: Enrico Natale. Música: Jason Lazarus y Joe Trapanese. Distribuidora: BF París. Duración: 98 minutos. Apta para mayores de 13 años.
Caracortada, El Padrino, Serpico, Tarde de perros, Fuego contra fuego, El informante, El precio de la ambición / Glengarry Glen Ross, Justicia para todos, Insomnia / Noches blancas... La carrera de Al Pacino está llena de grandes películas e inolvidables actuaciones y, precisamente por eso, es difícil entender cómo aceptó trabajar en un film tan mediocre como Exorcismo: El ritual. No es mi intención meterme en el bolsillo de nadie y desconozco la situación financiera de Pacino, pero si no es porque se trató de una forma fácil de embolsar una buena suma en poco tiempo es incomprensible que una leyenda viviente de 85 años haya elegido un guion tan pobre como este.
Basada en hechos reales que protagonizaron el joven padre Joseph Steiger (Dan Stevens) y el veterano Theophilus Riesinger (un Pacino que imita el acento alemán) en la ciudad de Earling, Iowa, en octubre de 1928, Exorcismo: El ritual retoma varios de los elementos que inspiraron a William Peter Blatty para escribir la novela y luego el guion de la infinitamente superior El exorcista.
Más allá de la básica y elemental introducción de la época, el lugar y los personajes, buena parte de la hora y media del film se concentran en el caso de la posesión demoníaca de Emma Schmidt (Abigail Cowen), una joven a la que se le irán practicando durante cuatro meses varias sesiones de exorcismos a cargo de alguien experimentado en estas lides como el fraile capuchino Theophilus Riesinger.
Que nadie espere que David Midell (NightLights, 2014; The Killing of Kenneth Chamberlain, 2019) se acerque a las cimas del clásico de 1973 dirigido por William Friedkin, ni siquiera el buen nivel de la saga de El conjuro. Exorcismo: El ritual es una acumulación de lugares comunes, una sucesión de escenas que no generan demasiado interés ni sustos. Un film que parece haber sido concebido siguiendo las directivas de un manual gastado del género y luego terminado sin sacar jamás el piloto automático, y cuyo único atractivo a priori, la presencia de Pacino, resulta una más de las tantas frustraciones que genera.
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