Marcelo Piñeyro comienza a rodar Las viudas de los jueves

Entre marzo y mayo se filmará la transposición que el director de Kamchatka y Marcelo Figueras escribieron a partir del best seller de Claudia Piñeiro. Pablo Echarri, Ana Celentano, Gabriela Toscano, Leonardo Sbaraglia, Gloria Carrá, Ernesto Alterio, Juan Diego Botto y Juana Viale encabezan el elenco de esta coproducción con España que se estrenará en septiembre.

Las viudas de los jueves, séptimo largometraje de Piñeyro basado en la novela ganadora del Premio Clarín 2005 sobre las miserias en plena euforia del menemismo, se filmará desde comienzos de marzo en locaciones de la provincia de Buenos Aires con producción de Haddock Films, Tornasol Films, Castafiore Films y Telefé. La fecha de estreno ya está confirmada: 10 de septiembre, con distribución de Alfa Films. Para el martes 24 de febrero se anuncia una presentación formal del proyecto para la prensa a realizarse en la Maison del hotel Four Seasons.

La producción ejecutiva será de Vanessa Ragone, el diseño de arte de Jorge Ferrari, la dirección de arte de Juan Mario Roust y la fotografía y cámara de Alfredo Mayo.

Sinopsis: En el barrio privado Altos de la Cascada la vida transcurre idílica como siempre, entre casas que imitan mansiones con grandes jardines y piscinas climatizadas. Separado de la realidad por muros y cámaras que todo lo vigilan, el country es una burbuja perfecta en un país erizado de espinas. Una mañana tiene lugar un descubrimiento macabro: tres cadáveres aparecen flotando en una piscina. El hallazgo conmueve a esa cerrada comunidad que se apresura a caratularlo de accidente y a definirlo como tragedia e infortunio. Pero la revisión de las últimas actividades de las víctimas hace dudar sobre el carácter accidental de esas muertes. Por debajo de su fachada impoluta, el barrio los Altos se revelará precario como un polvorín, desmintiendo la creencia de que la prosperidad es eterna y de que la abundancia equivale a la felicidad. En ese mundo perfecto las certezas comienzan a desmoronarse y crece la sensación de que lo peor está por suceder.