Festivales
El otro cine argentino (las películas fuera de competencia)
La oferta de películas nacionales en este 16º BAFICI es tan amplia (60 largometrajes) que es casi imposible para el público (e incluso para la prensa especializada) acercarse a muchos de esos títulos. Por eso, la inmensa mayoría de los films que no se programa dentro de las tres competencias oficiales (Internacional, Argentina, Vanguardia y Género) suele pasar injustamente inadvertida, pero merece ser rescatada aunque más no sea brevemente.
Allí están, por ejemplo, la muy divertida El mercado, de Néstor Frenkel, que nació como un encargo institucional del estilo de Camisea, de Enrique Bellande, pero que el talento y la creatividad del director de Buscando a Reynols y El gran simulador terminó convirtiendo en un inteligente y atrapante ensayo histórico y sociológico sobre el viejo mercado de frutas y verduras, el actual shopping, los cambios arquitectónicos en el barrio (hay algo de En construcción, de José Luis Guerín) y, claro, en el perfil de los vecinos del Abasto, ayudado por un prodigioso trabajo del DF Diego Poleri; Fulboy, infrecuente e íntimo acercamiento de Martín Farina (con escenas de desnudos completos en las duchas de los vestuarios) a la vida cotidiana de varios jugadores y a la trastienda del Club Atlético Platense; y Anagramas, nueva exploración del deseo, la neurosis, la búsqueda del amor y la creación colectiva de Santiago Giralt, ahora con una apuesta más coral (con Leonora Balcarce, Nahuel Mutti, Nicolás Pauls, Lautaro Perotti y Catarina Spinetta), pero que retoma algunos elementos ya trabajos en la notable Antes del estreno.
Tampoco deberían soslayarse El color que cayó del cielo, en el que Sergio Wolf construye tras Yo no sé qué me han hecho tus ojos un apasionante relato con personajes fascinantes sobre un tema en primera instancia árido como los meteoritos (aquí la reseña); Cosano: La vida secreta de un vestido, de Diego y Pablo Levy (los de Novias, madrinas, 15 años y Masterplan), sobre la cotidianeidad de un diseñador de modas como Claudio Cosano que divide su trabajo entre el glamour de las celebridades en las pasarelas y los pedidos de clientas de todas las edades provenientes, por ejemplo, de “la cole” de Villa Crespo; Al fin del mundo, bellísimo retrato de Franca González sobre la vida en Tolhuin, un desolado pueblo de Tierra del Fuego integrado por gente de todas las provincias, donde el invierno parece no tener fin; o El rey del rocanrol (La leyenda de Pajarito Zaguri), homenaje de Néstor Rodríguez Correa a ese verdadero precursor -recientemente fallecido- que fue el autor de Rebelde y que, por suerte, está más cerca del retrato humano que del bronce de tanto rockumental exaltador.
Un recorrido por ese inexpugnable universo “fuera de competencia” debería incluir también a ese excelente trío de títulos que llegó desde el Festival de Mar del Plata integrado por Escuela de sordos, de Ada Frontini; La laguna, de Gastón Bottaro y Luciano Juncos; y Fantasmas de la ruta, de José Celestino Campusano.
Y hay, por supuesto, muchas más películas nacionales valiosas (ni hablar de los cortos) en este BAFICI, un festival descomunal que obliga a resignarnos a ver mucho menos de lo que todos quisiéramos.
COMENTARIOS
DEJÁ TU COMENTARIO



FESTIVALES ANTERIORES
Críticas breves de tres valiosos films distinguidos por los jurados de sus respectivas secciones.
-Este sábado 12 de abril se entregaron en La Usina del Arte las distinciones de la vigésima sexta edición del festival porteño.
-LS83 obtuvo el Premio Ciudad de Buenos Aires al mejor largometraje nacional en todas las competencias.
-La virgen de la Tosquera logró el Gran Premio del Jurado de la Competencia Internacional; y Bajo las banderas, el sol, el de la Competencia Internacional.
Cierre de la trilogía iniciada con 36 horas (2021) y Cuando oscurece (2022).
El nuevo film de Seles ganó el Premio Especial del Jurado de la competencia dedicada a lo nuevo del cine nacional.
<p>Ví \"Anagramas\" de Santiago Giralt.</p> <p>Altamente recomendable, grandes actuaciones, reales sinceras y pasionales. Hermosa la fotografía con un muy inteligente guión. Aplaudo a las caras nuevas y al cine de arte.</p>