Críticas
Estreno en cines
Crítica de “Beetlejuice Beetlejuice”, película de Tim Burton con Michael Keaton, Winona Ryder y Jenna Ortega
Tras su première mundial como película de apertura de la Mostra de Venecia 2024, llega a los cines de todo el mundo esta no demasiado inspirada secuela de Beetlejuice, el superfantasma, aquel exitoso film de 1988también dirigido por Burton con Michael Keaton, Winona Ryder, Catherine O'Hara (los tres regresan en esta nueva entrega), Alec Baldwin y Geena Davis.
Beetlejuice Beetlejuice (Estados Unidos/2024). Dirección: Tim Burton. Elenco: Michael Keaton, Winona Ryder, Jenna Ortega, Catherine O'Hara, Justin Theroux, Monica Bellucci, Willem Dafoe y Danny DeVito. Guion: Alfred Gough y Miles Millar. Fotografía: Haris Zambarloukos. Edición: Jay Prychidny. Diseño de producción: Mark Scruton. Vestuario: Colleen Atwood. Música: Danny Elfman. Distribuidora: Warner Bros. Duración: 104 minutos. Apta para mayores de 13 años.
(Esta reseña fue publicada durante la cobertura de la 81 Mostra de Venecia)
La elección de la película de apertura para un festival siempre es una decisión dilemática. Los motivos relacionados con el impacto, la publicidad o la política suelen imponerse a los estrictos merecimientos del film en cuestión. Según el momento y el país, el “mensaje”, las estrellas que lo protagonizan o la personalidad del director deciden su selección más que el interés o valía de la propia y específica obra cinematográfica. En fin, y sin más rodeos: Beetlejuice Beetlejuice no ha sido una excepción (que siempre, también, las hay) a esta regla.
En las declaraciones que realizó Tim Burton en la conferencia de prensa aquí en Venecia, el director comentó su hartazgo en torno al momento actual de la industria y las particularidades del modo de producción del presente. Dijo no haber vuelto a ver Beetlejuice (la original, de 1988) para hacer la que presentó hace unas horas, ya que no se trata de una de esas secuelas que vuelven a la vida ciertas películas, retoman o generan sagas con el objeto de exprimir algunas gotas más a alguna idea exitosa con el único objeto de ganar dinero. Tras el éxito de la serie Merlina (no necesariamente por señalarla como una prisión, sino por el nuevo crédito adquirido para hacer lo que quisiera), el creador de El joven manos de tijeras, Marte ataca y El cadáver de la novia declaró que su voluntad era la de retornar al lugar de disfrute y libertad.
Pero a veces las secuelas del encierro, los hábitos adquiridos en el devenir de períodos de situaciones impuestas o toleradas, no son tan fácilmente susceptibles de ser dejados de lado. Beetlejuice Beetlejuice confirma eso que se venía percibiendo en los últimos largometrajes de Burton: cierto agotamiento y reiteración, algo de superficialidad y ligereza en relación con su consabida empatía con los diferentes. Lo que en su momento nos había enamorado era, justamente, la pasión de esos freaks a los que retrataba con tanto cariño. Y eso, sólo aparece a cuentagotas en este caso.
De la primera entrega reaparecen los personajes interpretados por Michael Keaton, Winona Ryder y Catherine O'Hara. Ahora se suman Jenna Ortega (Merlina), Justin Theroux, Monica Bellucci, Arthur Conti, Danny DeVito y Willem Dafoe. Las criaturas que habitan esta película son más traumadas que extrañas; el tono extremo de las actuaciones se acerca antes a la histeria que a la excentricidad. El ritmo más que veloz o vertiginoso es apresurado e inconsistente.
Pero, ¿cuál es la excusa narrativa? El tiempo ha pasado, y la película retoma la vida de los Deetz cuando, por el deceso del padre, la familia debe retornar a Winter River, a la casa embrujada, al ático con la maqueta del propio pueblo, al portal al más allá y al fantasma más hiperkinetico y pesado del que se tenga memoria, claro está. El problema no es en modo alguno la falta de continuidad entre las películas; no soy de los que están buscando errores o contradicciones, como si la mitología creada por el cine importara un mandato divino, que no puede desconocerse. Lo que sucede es que la sucesión de circunstancias demuestran que la deriva carece de la convicción y fe en sí misma que caracterizaban las primeras películas de Burton.
El juego con los excesos gore funciona mejor que la mayoría de los chistes, que se ven venir desde muy lejos (uno, que ni siquiera es tan bueno, relacionado con el tren que lleva las almas, incluso se repite). El homenaje al cine de terror italiano sirve más por la idea que por el resultado. Todo parece un poco más desganado, incluido el propio Beetlejuice: en el original, omnipresente, era ciertamente irritante; aquí, deja la mayor parte del metraje a las tres generaciones de mujeres de la familia.
Construida más como una serie de viñetas que, con cierta lógica narrativa, la sensación para el espectador es la de estar visitando un parque temático con eje en el universo de Beetlejuice y no percibiendo o transitando por él. Ello, en el caso del personaje interpretado por Monica Belluci (su personaje es el de la primera mujer de Beetlejuice, un fantasma que puede succionar el alma de otros espectros), es “físicamente” así, al “deslizarse” en el cuadro como si flotara, tuviera ruedas o patines. O anduviera en un carrito (sí, uno de esos con los que se recorren las atracciones en un parques de diversiones). Quizás lo que más distancia de esta nueva Beetlejuice es que el mundo de Burton siempre parecía más cercano al de los trenes-fantasma de una feria de pueblo, al cartón pintado y la goma espuma, a las marionetas, que a este devenir brilloso, superficial, desangelado.
Sumate a la comunidad OtrosCines/Club
Las suscripciones son la mejor manera para que las lectoras y los lectores apoyen directamente a los emprendimientos periodísticos independientes y ayuden a sostener un producto de calidad que mantiene el acceso a todos sus contenidos de forma gratuita. Además, se accede a una amplia oferta de beneficios y contenidos exclusivos.
MÁS INFORMACIÓN
SOBRE BENEFICIOS
Y SUSCRIPCIONES
COMENTARIOS
-
SIN COMENTARIOS
DEJÁ TU COMENTARIO



CRÍTICAS ANTERIORES
-Nominada al Oscar a Mejor Película Internacional, ganadora de cinco galardones en el Festival de Cannes (incluido el Premio Especial del Jurado y el de la crítica internacional FIPRESCI) y del voto del público en San Sebastián, la más reciente producción de Rasoulof llegó finalmente a los cines de Argentina el 27 de febrero.
-Tras su paso por las salas, llega a la plataforma de streaming MUBI desde el viernes 25 de abril.
Aunque nació en Turquía, pocos directores encarnan la “italianidad al palo” como Özpetek, quien en este caso propone una tragicomedia coral con las actrices con las que ha trabajado a lo largo de su carrera.
El realizador de De caravana, Tres D, Todo el tiempo del mundo, Maturità, Casa propia y Ahora y siempre vuelve 15 años después al mundo del cuarteto cordobés aunque con un cambio de registro y de género. Tras su reciente paso por la Competencia Argentina del BAFICI, se estrena en 30 salas.
Los directores de la elogiada El perdón / Ballad of a White Cow (2021), regresaron en 2024 a la Competencia Oficial de la Berlinale con su segundo largometraje en común, que ahora se estrena en 10 salas argentinas.