Festivales

Crítica de “Las mil y una”, de Clarisa Navas (Sección Panorama) - #Berlinale

Tras el muy auspicioso debut con Hoy partido a las tres, esta talentosa directora regala un segundo largometraje aún más valioso, potente y logrado.

Publicada el 20/02/2020


Las mil y una (Argentina-Alemania/2020). Guion y dirección. Clarisa Navas (Sección Panorama - Película de Apertura). Elenco:  Sofía Cabrera, Ana Carolina García, Mauricio Vila, Luis Molina y Marianela Iglesia. Fotografía: Armin Marchesini Weihmuller. Música: Claudio Juarez, Desdel Barro (Hiedrah). Edición: Florencia Gómez García. Dirección de arte: Lucas Koziarski. Sonido: Mercedes Gaviria Jaramillo. Producción: Diego Dubcovsky y Lucía Chávarri. Duración: 120 minutos.


La segunda película de quien nos había sorprendido con su ópera prima, Hoy partido a las tres, fue seleccionada para abrir la enorme sección Panorama (parte de las selección oficial) de la 70° edición de la Berlinale. Si es cierto eso de que la segunda película es más difícil de llevar adelante para un realizador que la primera, Navas confirma que es una directora a la que cabe prestar especial atención.

Chica conoce chica, no faltará quien se quede con el costado LGBT de la deriva (sin dudas importante, esencial), pero hay algo de la libertad de los cuerpos, de la circulación del deseo y de los sitios donde acaece la acción que hace que esta propuesta mucho más ambiciosa que la de su ópera prima se transforme en una verdadera experiencia que requiere de la gran pantalla para ser apreciada como corresponde. En ese sentido, las cuatro inmensas salas del complejo Cinemaxx (se proyectó de forma casi simultánea en la 4, la 5, la 7 y la 10) fueron el ámbito ideal para lograr -casi literalmente- ingresar a ese mundo tan particular, peligroso y atrayente que conforma Las Mil, barrio en el que creció la talentosa directora correntina. Es que Las Mil es un protagonista más de la película. Sus calles, pasillos, recovecos, baldíos forman parte de la narración tanto como las personas que lo habitan. Llama la atención esa vida que conjuga lo familiar y cariñoso con lo peligroso y hasta fuera de la ley.

El hecho de conocer en serio ese lugar seguramente es parte del secreto para ese acercamiento que sólo el iniciado puede transmitir. No hay ajenidad, lejanía o prejuicio. Los peligros generan temor, es cierto, pero también algo de ese cosquilleo o inquietud que tan vecinos son del deseo y el placer. En los interiores, en el ámbito familiar, la cama es el lugar de encuentro, de diálogo; los cuerpos conviven con un poco de impudicia pero la tensión nunca pone en juego el tabú. En las calles el asunto es distinto. Allí algo parecido a un estado de naturaleza hace que lo físico asuma una entidad y presencia que se expresa en el deporte, en el deseo, en el sexo.

Quedarse en la etiqueta (que, se entiende, muchas veces sirve para encasillar y, en alguna manera, favorecer la difusión) del cine LGBT es perderse parte de la bella diversidad, de la potente libertad que caracteriza al cine de Navas. Su mirada nos desafía, pone en cuestión los límites. Los límites del deseo al punto de poner en disputa, en litigio, conceptos tan aparentemente indiscutibles como el de la salud. La política (La Política, deberíamos decir) no se hace de discursos ni de lugares comunes: la libertad de elegir qué hacer con nuestras vidas y qué hacer con nuestros cuerpos no tiene límites. O sí, uno solo: no hacer daño a otro.

Con los personajes caminamos esos senderos, percibimos su respiración. La cámara en mano nos transporta con ellos. La sensación de libertad (con el peligro que ella conlleva, claro está) nos atraviesa. La mirada de Clarisa Navas nos devuelve un mundo en el que una feliz (¿pero no tan sana?) manera de elegir cada cual su vida impera. Presente y futuro se encuentran en un lugar donde la juventud manda; los adultos, fuera de campo (o casi) evidencian otra energía, ¿otros valores? Es que, sin caer en la distinción maniquea que nos llevaría a La guerra del cerdo, lo cierto es que no todo es luminoso. Junto a esa corriente de los cuerpos, a esa dinámica del deseo, el chisme, el cotilleo, la irresistible tentación de opinar y meterse en la vida del otro opera como fuerza contrapuesta, como ancla que impide levantar vuelo.

En ese contexto, Las mil y una es, también, una historia de amor. Una historia de amor única. Como único es el universo que retrata. Una película, unas vidas que sólo pueden existir en Las Mil, Corrientes. Y que sólo pueden ser contadas con la sensibilidad y empatía que la muy talentosa Clarisa Navas posee.


Nuestra entrevista a Clarisa Navas por "Las mil y una"




Toda la información sobre OtrosCines/Club y cómo sumarse a nuestra comunidad cinéfila


COMENTARIOS

  • 6/07/2021 20:49

    A mi me pareció interesante, me la han sugerido en la facultad. Para relacionarlo con temas tales como: . La mirada sobre los adolescentes, desarrollo psicosocial y cambios en el cuerpo, la identidad como derecho humano, derecho de los adolescentes para el acceso al sistema de salud, estilos de vida de los adolescentes y jóvenes. Inclusión social, escolaridad y trabajo. Educación sexual integral. Embarazo adolescente.... Así que si, a mi me ha parecido muy buena peli.

  • 21/12/2020 10:57

    Gracias querido dufo y un feliz 2021.!!!!!

  • 11/12/2020 19:40

    Los textos de Pablo Nuñez constituyen un noble aprendizaje de los interrogantes que nos provoca el cine mas sensible.... gracias Pablo.

  • 7/12/2020 19:26

    Más allá que la poco feliz comparación desfavorable que hace Esmerando de esta película con el cine de Enrique Carreras, Armando Bo y los Sofovich, hay que agradecer el debate que abre. Al ver la película me preguntaba cuál era el rumbo de la historia, que se propone mostrar Clarisa Navas. porque una narración a los ponchazos hasta un final donde un personaje se esfuma. No es tan complicada y sesuda la respuesta porque en la película lo que tenemos es el punto de vista de una adolescente de 17 años que transita el complejo camino para llegar al mundo de los adultos en ese entorno violento y discriminador en un barrio popular del interior del país. El personaje central de la película crece queriendo jugar al basquet, no le interesa la escuela, en su barrio convive con adolescentes que no se ajustan a los cánones de la sociedad y es en ese proceso donde descubre que puede enamorarse de una mujer que le lleva varios años pero no lo puede publicar, lo tiene que esconder, en un barrio donde le puede costar la vida. La película es una descripción del barrio de Las Mil y se le podrá reprochar a Navas que no hay un final estruendoso porque no hay violación, no se llega a la tragedia, no parece pasar nada extraordinario, simplemente la vida de Iris no volverá a ser la misma de siempre. Con todo respeto, me parece una película muy interesante en todo momento. Un cordial saludo para todas y todos. .

  • 7/12/2020 18:02

    cuarentena: de todo lo que mencionás, opino exactamento lo contrario.

  • 7/12/2020 9:57

    No hay historia, no hay tensión dramática, no hay diálogos interesantes, no hay personajes interesantes, hay un pésimo gusto musical, el sonido es malo y muchas veces no se entienden los diálogos, un film totalmente intrascendente

  • 6/12/2020 16:58

    Todo bien Esmerando...pero si hablamos de Bo, Carreras o Sofovich prefiero quedarme con el cero del termometro.....

  • 5/12/2020 23:19

    Dan ganas de preguntar si se trata de una desagradable ironía.!!Al mirar las calificaciones . Que terrible malformación surgió en el cine nacional hace unos quince años con la aparición del estilo de guión "Cine de Autor". Más allá del pomposo nombre las películas que adhieren a ese movimiento lo que parece brillar de ausencia es el guión tal cual lo conocemos en la dramaturgia clásica del séptimo arte .No hay conflicto o por lo menos no está expresado en una historia como tal , Apenas pinceladas , momentos , esbozos de cortometrajes sin narrativa en secuencia ,sin búsqueda de un clímax de mayor tensión dramática .Mucho menos intriga en incidentes visuales de escenas destacadas ,Se podría decir que describen el cero del termómetro. Frente al pasado éste "cine" pierde notablemente , Pierde ante los años setenta de las películas de Armando Bó , de Enrique Carreras , Hugo Sofovich para no ponernos más delicados en la selección .Las películas de los cuales tenían sencillamente una historia .un delineamiento de personajes en su perfiles psicológicos.Incidentes que demostraban una narrativa secuencial. En fin , estamos ya un poquito hartos de productos en cuyos personajes casi nadie ríe , nadie llora , nadie NADA. Mazacotes de diálogos en cuyo desarrollo parece que piensan inventar el teleteatro . Eso es lo que veo en ésta peli , solo pinceladas , esbozos de una vida que no propone , Para ser documental se queda corta. La cultura correntina no merece ésta expresión de anomia , Tanta juventud a ingresado a la realización de "filmaciones " de películas sin tratar de seguir enseñanzas de Syd Field, Eugene Vale, Simón Feldman , Robert McKee entre tantos otros autores de libros para guionistas. Que están en Internet. Espero que cuando se asombren de que el cine argentino no se destaca en tantos festivales a los que concurre y comprenda que es hora de tratar de rescatar a cantidad de escritores . tantas ideas originales de teatro y literatura. Muchas historias esperan para adaptarlas a la producción nacional . Que pase como una moda desagradable el cine argentino anti guión. Aprendamos de las grandes películas que ganaron en el exterior ,Veremos que todas ellas poseían la Identidad de nuestro país y fuertes relatos plenos de originalidad.

  • 5/12/2020 14:17

    Realmente atrayente este acercamiento a las impensadas formas en que puede nacer el deseo y la seducción en jóvenes más allá de condicionamientos sociales a la usanza. En ese sentido es conmovedor el retrato que hace Sofia Cabrera de su personaje....un prodigio de credibiidad..

  • 4/12/2020 0:25

    La talentosa directora Clarisa Navas no sólo ha logrado filmar su segunda película, con lo difícil que es filmar en el interior de este país, sino que además supera lo hecho en la primera. En HOY PARTIDO A LAS TRES sus mayores aciertos eran la descripción de la vida en una pequeña localidad del interior sacudida por un partido de fútbol femenino y la buena dirección de un elenco compuesto en su mayoría por no profesionales de la actuación. En LAS MIL Y UNA toma decisiones de riesgo como filmar una película de dos horas sobre lo que pasa en una barrio humilde de la ciudad de Corrientes desde el punto de vista de un grupo de jóvenes que no se ajustan a los cánones de una sociedad donde reina la violencia machista. La protagonista Iris con tan sólo 17 años juega al basquet y no parece muy entusiasmada con estudiar al igual que sus hermanos. A lo largo de la película el espectador asistirá a las enormes dificultades en su tránsito hacia el mundo de los adultos mezclado con el amor que siente por una mujer que le lleva más de 10 años. Puede existir la tentación de colgarle a esta película la etiqueta de LGBT, cosa que a Navas no le molesta en lo más mínimo, pero la película es bastante más que eso y, lo más importante, es que la directora vuelve a acertar en la muy interesante descripción del barrio y en el alto rendimiento que logra de todo el elenco. Una de las mejores películas argentinas del año. (8/10)

DEJÁ TU COMENTARIO


FESTIVALES ANTERIORES


Todos los premios - #BAFICI2025
OtrosCines.com

-Este sábado 12 de abril se entregaron en La Usina del Arte las distinciones de la vigésima sexta edición del festival porteño.
-LS83 obtuvo el Premio Ciudad de Buenos Aires al mejor largometraje nacional en todas las competencias.
-La virgen de la Tosquera logró el Gran Premio del Jurado de la Competencia Internacional; y Bajo las banderas, el sol, el de la Competencia Internacional.

LEER MÁS
Críticas de “The bewilderment of chile”, de Lucía Seles, y “Lo deseado”, de Darío Mascambroni (Competencia Argentina) - #BAFICI2025
Diego Batlle

El nuevo film de Seles ganó el Premio Especial del Jurado de la competencia dedicada a lo nuevo del cine nacional.

LEER MÁS